Usted puede montar su bicicleta cuando le provoque.
Usted puede compartir la bicicleta con los amigos.
Cuando monta, usted y su bicicleta llegan al mismo tiempo.
Su bicicleta no es celosa: no le importa cuantas ciclas tenga por ahí.
Usted nunca escuchará: ”Sorpresa querido... vas a tener un triciclo“.
Si su bicicleta está desajustada, usted mismo la puede apretar y ella no gritará.
Cuando usted insulta a su bicicleta no tendrá que disculparse antes de volverla a montar.
A las bicicletas no les da dolor de cabeza.
Su bicicleta no lo hará sentir mal si usted no es bueno para montar.
A su bicicleta no le importa si usted llega tarde.
Usted podrá montar su bicicleta todo el tiempo que quiera y ella nunca sentirá dolores
Usted nunca tendrá que ducharse ni perfumarse para montar en su bicicleta
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